Olivia Talier es la protagonista de esta novela fresca, divertida, con un toque de glamour y mucha psicología. Olivia, opositora a notaría, decide romper con el ritmo de vida que su familia adinerada le ha marcado desde el principio y cumplir su sueño, ser directora de cine. Entre otras situaciones descabelladas y divertidas, Olivia descubre que un fantasma muy particular habita en su nuevo apartamento.
Tal y como su autora la ha bautizado, además de caracterizarse por ser un chick lit, Un féretro en el tocador de señoras, es pionera en el género de la psico comedia: “además de divertir, aporta una gran reflexión a las lectoras, no se queda solo en la superficialidad”, apunta Regina Roman. La verdad es que el libro es muy divertido, ya no solo por las situaciones sino también por la forma de hablar y de expresarse. Es muy recomendable y más después de leer unos cuantos libros más sesudos o serios.
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